El
concepto de cableado estructurado, red de voz y datos, hace
referencia al soporte físico de un sistema de comunicaciones que
posee unas características determinadas como son:
Disponer
de tomas estandarizadas para voz, datos u otros servicios
telemáticos.
Las
tomas son distribuidas por múltiples puntos de la empresa previendo
futuras conexiones y ampliaciones de la red de voz y datos.
Este
sistema puede distribuirse en una planta, en un edificio o en un
campus de edificios.
La
administración se centraliza en puntos donde confluyen distintos
tramos de cable (UTP, FTP, ETC.) y/o Fibra óptica(FO).
Los
cables, la FO, los conectores así como los tramos completos (enlaces
y canales) están normalizados.
Ventajas:
Una
red de voz y datos, sistema de cableado estructurado, unifica en una
misma infraestructura de telecomunicaciones los servicios de voz,
datos y video con un sistema de gestión centralizado, aportando
importantes beneficios para las empresas:
Simplificación
de la infraestructura de comunicaciones.
Ahorro
en los costes de mantenimiento.
Optimización
de la gestión.
Flexibilidad
y modularidad, lo que permite facilidad de ampliación.
Instalaciones eléctricas:
Se
le llama instalación eléctrica al conjunto de elementos los cuales
permiten transportar y distribuir la energía eléctrica, desde el
punto de suministro hasta los equipos dependientes de esta. Entre
estos elementos se incluyen: tableros, interruptores,
transformadores, bancos de capacitares, dispositivos, sensores,
dispositivos de control local o remoto, cables, conexiones,
contactos, canalizaciones, y soportes.
Las
instalaciones eléctricas pueden ser abiertas (conductores visibles),
aparentes (en ductos o tubos), ocultas, (dentro de paneles o falsos
plafones), o ahogadas (en muros, techos o pisos).
Ejemplos de instalaciones de voz, de datos y electricas
Multiplexación
En el caso a), se consigue la
integración de ambos tipos de tráfico mediante el empleo de
multiplexores, asociados a modems u a otros equipos adaptadores al
medio de transmisión de que se trate: circuitos conmutados o líneas
dedicadas.
Una de las técnica básicas
empleadas para la integración de uno y otro tipo de tráfico es la
multiplexación por división en el tiempo (TDM), desarrollada hace
ya mas de 30 años, pero que aún sigue vigente. Con ésta, el ancho
de banda total se divide en períodos de tiempo que se asignan
secuencialmente a cada canal; la voz previamente se ha digitalizado
mediante algoritmos tales como PCM (64 Kbit/s), ADPCM (32 Kbit/s), u
otros que consiguen una transmisión aceptable con solo 8 Kbit/s.
Un ejemplo de tal hecho se manifiesta
en la oferta que están haciendo varios operadores de redes de datos,
entre ellos Telefónica y BT Telecomunicaciones, de transmitir voz
sobre redes Frame Relay, en aplicación a Grupos Cerrado de Usuarios,
aunque éste es un aspecto legislativo, siendo técnicamente posible
el hacerlo en cualquier caso. De nuevo, son las tarifas el factor
decisivo para que los administradores de redes se decidan por esta
solución, ya que si hacerlo así resultase mas caro que teniendo
redes independientes, no tendría sentido.
Telefonía en
Internet
Otra situación, muy actual, es la
que se está dando al cursar tráfico telefónico de larga distancia
sobre Internet; en este caso, el deterioro de la señal se ve
plenamente recompensado por el ahorro de los costes de la
comunicación, ya que se paga únicamente una llamada local. Su
dificultad radica en que al no haber estándares la incompatibilidad
entre distintos sistemas es obvia.
La telefonía en Internet, es un
fenómeno, aún incipiente, que está empezando a preocupar a los
operadores tradicionales, por el gran potencial de desarrollo que
presenta y por las dificultades que plantea su control y/o
regulación. Por otra parte, en Internet, al no disponer de un órgano
de gestión centralizado o un responsable único, no se puede
garantizar una determinada calidad de servicio ni un retardo
determinado, lo que juega en contra del tráfico telefónico a su
través que solo es posible por medio de un tratamiento software de
la señal vocal.
Redes de banda
ancha
El caso c) de redes específicamente
diseñadas para soportar tráfico de cualquier naturaleza es el que
más interés tiene cuando se trata de implantar la integración de
voz y datos. En este tipo de redes no suelen manifestarse problemas
de índole técnico y su estudio de viabilidad se reduce a un
análisis económico frente a otras alternativas.
La RDSI es el ejemplo más conocido
de una red digital en la que se integra tráfico de voz con tráfico
de datos (también admite vídeoconferencia), disponiendo el usuario
en su domicilio de una terminación común para ambos. En la RDSI
todo el diseño de la red se ha hecho, desde un principio, teniendo
en cuenta que iba a soportar ambos tipos de tráfico, por lo que su
implementación, siguiendo los estándares marcados, no plantea
problemas, existiendo acuerdos entre distintos operadores europeos
para interconectar sus redes (norma EuroRDSI).